El sexo es una parte fundamental para la vida humana y, además completamente normal y saludable poseer una libido vigorosa. Pero existe un punto en el que, tal vez, de un impulso natural y saludable, puede surgir un problema y del deseo sexual sano se puede pasar a estar fuera de control.

Normalmente, la diferencia entre disfrutar del sexo y ser adicto al sexo es evidente. La principal diferencia es que la adicción siempre causa sufrimiento y en ella, la persona, pierde el control.

señales de la adicción al sexo

Cómo detectar una adicción sexual

Una adicción sexual puede manifestarse de muchas maneras, por lo que tendrá que buscar una variedad de posibles señales de advertencia de que usted o su cónyuge o pareja son adictos al sexo. Entre las señales que pueden servirnos de alarma podemos encontrar:

  • El sexo domina la vida del individuo hasta excluir otras actividades.
  • El individuo practica sexo telefónico, sexo por ordenador, uso de prostitutas, pornografía o exhibicionismo.
  • La persona se masturba habitualmente.
  • Tiene múltiples parejas sexuales o engaña a sus parejas.
  • En casos extremos, la persona participa en actividades delictivas, como acoso, violación, incesto o abuso sexual de menores.

Además, debemos estar atentos también a los siguientes síntomas:

  • Las actividades sexuales repetitivas se convierten en el foco central de la vida de la persona hasta el punto de descuidar la salud y el cuidado personal u otros intereses, actividades y responsabilidades.
  • La persona realiza múltiples esfuerzos infructuosos para reducir significativamente el comportamiento sexual repetitivo
  • Continuación de la conducta sexual repetitiva a pesar de las consecuencias adversas o de la escasa o nula satisfacción derivada de la misma.
  • Tener este patrón de comportamiento durante seis meses o más
  • Comportamiento que causa angustia o deterioro significativo en el funcionamiento personal, familiar, social, educativo, ocupacional u otras áreas importantes.

La diferencia entre sexo sano y adicción sexual

Lo difícil de una adicción sexual es que cierta «obsesión» por el sexo es sana. Debemos tener una libido que nos haga desear el sexo. Pero se va demasiado lejos cuando la persona se preocupa más por el acto en sí que por la otra persona implicada.

Si usted o su pareja o cónyuge es un adicto al sexo, necesitará asesoramiento sobre adicción sexual. La ayuda de un terapeuta, grupos de apoyo y libros de autoayuda pueden ser muy importantes.

En Recovery Centro, centro de tratamiento de Adicciones y Desintoxicación en Cádiz, disponemos de tratamientos específicos para la adicción al sexo, cuya finalidad es conseguir que el paciente aprenda a controlar sus impulsos y mejorar sus relaciones personales. Para ello, evaluamos la situación individual del paciente para conocer dónde tenemos que actuar en función de los hábitos que producen esa compulsividad.

Trabajamos tanto en régimen residencial, como ambulatorio.

Por este motivo, si necesitas ampliar la información o tienes alguna duda, puedes contactar con nosotros y, uno de nuestros profesionales, te asesorará al respecto.