En la sociedad de hoy es frecuente encontrar gente que mezcla habitualmente el consumo de alcohol y el de cocaína. Estas dos drogas parecen formar una pareja perfecta de baile. A continuación vamos a ver por qué se combinan y qué efectos tiene mezclar cocaína y alcohol.

Cocaína y alcohol

La realidad es que el abuso de estas dos sustancias puede convertirse en un cóctel explosivo para el organismo. ¿Qué se esconde bajo su combinación? ¿Qué fenómeno químico origina y qué procesos de la dependencia hay detrás de su unión?

¿Por qué se mezclan estas drogas?

El uso combinado de alcohol y cocaína responde  a un proceso de enmascaramiento de los efectos por un lado, y por otro, a un erróneo proceso de lógica de contrarrestar las dos sustancias:

1# Porque el alcohol incita a la cocaína

El alcohol potencia el deseo compulsivo de cocaína porque es un depresor del sistema nervioso. Cuando es tomado en exceso produce un estado de sedación propio de la intoxicación alcohólica. Entonces la persona decide tomar cocaína para activarse y permanecer despierto más horas. Activa el sistema nervioso.

Los policonsumidores que no tienen pensado consumir cocaína en determinadas ocasiones, al final sucumben ante el estado de intoxicación que les provoca el alcohol.

Es por esto que muchos consumidores no toman cocaína si no se han emborrachado primero.

2# Por una creencia errónea: se cree que reduce la intoxicación del alcohol

Lo que sí hace es contrarrestar los efectos a corto plazo.

Consumen cocaína para beber sin emborracharse. En realidad no es que disminuya los efectos del alcohol, lo que hace es enmascararlos. Pero la intoxicación alcohólica es incluso mayor a nivel orgánico.  

La persona tiene una percepción subjetiva de que no está intoxicada. Pero no es real. Hay consumidores que toman cocaína porque no les gusta que los demás les vean borrachos. Al consumir esta sustancia parece que no lo estén.  

3# Al contrario ocurre lo mismo: se cree que el alcohol ayuda a combatir los efectos del consumo de cocaína

Ésta provoca ansiedad y nerviosismo, taquicardia. Cuando una persona consume rayas de cocaína, decide beber para tranquilizarse. Esto se debe a que el alcohol es un depresor del sistema nervioso y la cocaína es lo contrario, un estimulante. Tiene efectos sedantes. Se contrarrestan.

En ocasiones, lo que está sucediéndole al abusador de drogas es el proceso de dependencia llamado tolerancia inversa.  

El uso crónico hace que  una droga pierde su capacidad. La cocaína no funciona como estimulante, ya no da bienestar y no provoca verborrea ni sirve para ligar etc. Pierde sus efectos.

El consumidor recurre al alcohol buscando los mismos efectos que la cocaína ya que tiene esa capacidad eufórica en el primer momento. Es decir, se recurre a otras drogas buscando los mismos efectos que debería darle la que suele tomar.  

Aún así sigue tomando las dos drogas porque la otra es su preferida, a la que ha desarrollado dependencia. En la mayoría de los casos el consumidor no es consciente de este fenómeno.

 

cocaina y alcohol

 

Efectos al mezclar cocaína y alcohol

Los peligros que origina el consumo de las dos sustancias al mismo tiempo son:

1# Cocaetileno

El consumo simultáneo de ambas drogas se combinan en el organismo y da lugar químicamente a la producción de cocaetileno. Un neurotóxico producido por la metabolización de las dos sustancias en el hígado.

Características:

  • Dura más tiempo en el organismo.
  • Por tanto hace más daño. Es más tóxico que el consumo de una de las dos sustancias por separado.
  • Explicaría la compulsividad de los episodios de consumo.
  • Sus efectos son más intensos.
  • Aumenta el daño cerebral de la función de la toma de decisiones.
  • Las concentraciones de cocaetileno más significativas se dan cuando el alcohol se toma previamente a la cocaína.

2# Aumenta el consumo

Se abusa más de las dos sustancias: la cocaína hace consumir más alcohol y viceversa.

De esta manera se multiplica el riesgo de sobredosis ya que se puede llegar a consumir cantidades enormes de droga o alcohol. Mucho más de los que el cuerpo puede aguantar. Una intoxicación grave puede llegar hasta el coma o la muerte.

Se da órdenes contrarias al cerebro y el corazón se va a ver también afectado. Aumenta el riesgo de infarto de miocardio, cerebral, arritmias y muerte súbita.

Se incrementa la capacidad adictiva de las dos drogas.

3# Alteraciones cognitivas

La pérdida de consciencia, de memoria y la distorsión de la realidad es mayor. Aparece un incremento de la exposición a conductas de riesgo, por ejemplo, en las relaciones sexuales o conducir bajos los efectos. Además hay una mayor probabilidad de psicosis.

4# Cambios en el comportamiento

Es significativo el aumento de la agresividad. Se encuentra detrás de peleas producidas durante las noches del fin de semana. Es causa de visita a urgencias hospitalarias.

No importa la motivación sino el hecho de que la mezcla de cocaína y alcohol conlleva unos serios riesgos. Entre ellos, la muerte.